El 22 de agosto es una fecha memorable en la historia de la Copa América de vela, ya que fue el día en que se celebró la primera regata alrededor de la Isla de Wight en 1851. Barcelona acoge desde este jueves, 173 años después, la mítica competición deportiva y tecnológica, todo un reto para la capital catalana que, el primer día, ha superado con nota.
En el mar, el viento acompañó para el lucimiento de los barcos. En tierra, desde las playas o los espacios habilitados como el ‘race village’, hubo un constante ir y venir de ciudadanos, unos más puestos en la vela y otros acabados de aterrizar al mundo de los barcos voladores. El arranque, a las 14.11 horas, el momento más esperado desde hace meses, ha tenido como protagonistas a Alinghi Red Bull Racing (suizos) y Orient Express Racing Team (franceses).
Motivación extra
Con el mal sabor de boca de los últimos días tras sus incidentes con los mástiles, los helvéticos han hecho una gran primera carrera, tal como ha admitido su jefe de meteorología y reputado navegante Joan Vila: “Estamos contentos de la velocidad que hemos alcanzado e íbamos con extra de motivación por el tema del mástil, tenemos que ir mejorando, de eso se trata”.
El formato de la regata preliminar es distinto que en Vilanova i la Geltrú y Yeda (Arabia Saudí). Al competir con el barco definitivo, el AC75, el más grande, se hace uno contra uno (match race). Tanto en la primera jornada como el viernes y sábado se celebrarán hasta cuatro mangas de seis tramos cada una (seis vueltas al campo de regatas), aunque en función de la meteorología pueden ser cuatro u ocho, algo que se decide al empezar el día.
Fallo eléctrico de los italianos
La primera se la llevaron los suizos. En la segunda no hubo demasiada emoción porque Luna Rossa Prada Pirelli sufrió un problema eléctrico y tuvo que retirarse, con lo que el defensor del título, Emirates Team New Zealand, hizo una exhibición de vuelo. El duelo anglosajón, el mítico de la Copa América, fue para los americanos, que a pesar de hacer una mala salida y que se la llevara Ineos Britannia, en nada los superaron y la tercera fue para American Magic NYYC.
La cuarta y última, en la que los italianos repetían contra los franceses, fue para Luna Rossa Prada Pirelli. Su timonel Jimmy Spithill explicaba al acabar que desconocía qué les había ocurrido con el fallo del AC75 de la segunda regata pero que lo investigarán. Como ocurre casi siempre en esta competición, una cosa es lo que saben los equipos y otra distinta es lo que explican que pueda darles ventaja frente a sus contrincantes.
Un día excepcional
Los AC75 pueden navegar hasta los 21 nudos, algo que sería insólito en Barcelona. De hecho, en la preliminar de Vilanova de septiembre del año pasado lo que ocurrió fue lo contrario, que no se lograron los 6 nudos mínimos de forma estable para que se pudiera disputar la carrera.
Pero la capital catalana ha querido dar lo mejor de sí este primero de los cuatro días. El director de la regata, Ian Murray, ya ha avisado desde primera hora que sería un día excepcional con vientos del suroeste de 12 a 15 nudos con un oleaje de 0,5 metros.
Cuatro equipos con un punto
Con estas características los espacios de ‘hospitality’ de administraciones y patrocinadores estaban llenos, como el de la organización, America’s Cup Event (ACE) en el Port Olímpic. Junto al campo de regatas e inscritos previamente, había menos barcos de espectadores de lo esperado, a pesar de que hay un millar de embarcaciones registradas.
Primer día superado, un punto para kiwis, americanos, italianos y suizos y cero para franceses y británicos. Este viernes, otras cuatro regatas con emparejamientos distintos servirán para seguir testando a barcos y tripulaciones.